¡Ha nacido un dinosaurio!

Nuestros alumnos de Primer Ciclo de Infantil asisten al prodigioso nacimiento de un dinosaurio.

Tras varios días de espera, con el huevo de dinosaurio sumergido en un recipiente con agua, llega el momento en que nuestro amigo “Benito” rompe el cascarón. Emocionados y expectantes, vemos asomar un trozo de su cabeza por la grieta que se ha producido en el huevo. Es hora de ayudar a “Benito” a nacer. Ayudados por la mesa de luz para no perdernos detalle, sacamos el huevo del agua, quitamos los trozos de huevo que no dejan que “Benito” se asome a saludarnos, y tras un minucioso proceso… ¡nace nuestro nuevo amigo!.

Está frío y nos mira asustado, por eso le tapamos y mimamos para que sepa que está en buenas manos. Nos lo hemos pasado muy bien en esta gran experiencia fomentando la observación y la paciencia en un juego tan divertido como dar la bienvenida a un nuevo miembro de la clase.

BIENVENIDO BENITO